#90 Comprensible y respetable, tú formas parte del grupo de personas que sabemos a ciencia cierta y de primera mano que, si se es feliz con la pareja y se está enamorado de ella, no es necesario recurrir a una única fecha para demostrárselo.
En mi comentario me refería más bien a quienes no la tienen y tratan de disimular (bastante mal por cierto) su amargura alegando que les parece una cursilería cuando en el fondo, muy probablemente, están deseando tener con quien celebrarlo. Eso, personalmente, lo encuentro bastante hipócrita.

#81 El medico de nuestra historia fue ordenado ajusticiar por Claudio II en el 270. La iglesia católica asoció la festividad del catorce de Febrero a este mártir (por los motivos antes comentados) en el 498.
Algo comprensible teniendo en cuenta la velocidad a la que la Santa Madre Iglesia resuelve la mayoría de sus asuntos.

#56 Los comercios y otros organismos se aprovechan de lo que el pueblo no sabe desde que el mundo es mundo. Pero lo peor sin duda es que los ciudadanos no sólo lo permiten, sino que lo hacen mirando embobados sus televisores y con una sonrisa en los labios.
"Pan y circo", y así se creó un imperio.

#52 Te aplaudiría si supiese que podrías oírme. Simplemente, bravo.

#46 Estoy absolutamente de acuerdo contigo salvo por un detalle: Lo que han generado los comercios es únicamente la idea de que hay que regalar algo ese día y que el resto del año no es necesario ser romántico.
La fecha de San Valentín y su patronazgo sobre los enamorados se instauró en el 498 d.C. para honrar la memoria de un medico romano, ordenado sacerdote tras abrazar el cristianismo, que casaba en secreto a los soldados con sus parejas (cosa que estaba prohibida por el emperador al considerar la vida familiar totalmente incompatible con la carrera de armas) y eso fue el motivo de su ejecución.
La última frase que dices no podría ser más cierta.

Oh, pero cuanta gente aterrada ante la idea de vomitar purpurina... supongo que querrán conservarla para cuando la suerte (o la sensatez) decida concederles una pareja con quien compartirla.
Lo digo porque cada vez que leo esos comentarios me viene a la memoria el típico niño rechazado por ambos equipos en los recreos, que se marchaba indignado gritando "me da igual, en el fondo no me gusta el fútbol, so tontos" y cuando nadie miraba se escondía en los servicios a llorar porque no le dejaban jugar con los demás como realmente hubiese querido.
No sé muy bien por qué tengo esa asociación de ideas.

En el fondo te tengo envidia, Godzilla: Estoy seguro de que también hay quien me odia por esta página, pero tus enemigos al menos tienen la decencia de dar la cara (es un decir, ya que ha enviado su queja en anónimo y pienso, al igual que muchos, que se trata de alguien registrado que no quiere ganarse antipatías públicamente)
Sea como sea, enviar esta clase de quejas bajo anonimato me parece tan absurdo e infantil como entrar a un TQD que no gusta simplemente para dejar claro que no gusta. No creo que este sea lugar para pataletas.

No te enfades tanto con ellos, piensa que La Sexta acaba de servirte en bandeja una excusa genial con el añadido de que, además, siguiendo la lógica de su publicidad estarías siendo sincero:
"Cariño, ¿cuando vas a dejar de quedar con tus amigos para jugar a la Playstation y desplazarme los Domingos para irte con ellos a ver el fútbol?"
"Pronto".

#72 La tuya es con diferencia la única respuesta lógica que me han dado en mucho tiempo respecto al asunto de las prisiones y el buen o mal funcionamiento de las mismas en nuestra sociedad.
Si tuviera puesto un sombrero, me lo quitaría ante ti. Enhorabuena.

Quienes vivimos aquí donde pasó todo sabemos que la actitud que han tomado esas bestias se debe a que saben que en el peor de los casos acabarán en prisión (ese alojamiento con gimnasio, TV, sala de juegos y menú diario que les pagamos quienes tenemos las manos limpias) y probablemente saldrán de allí antes de lo establecido.
Si las cárceles fueran aquello para lo que en esencia se diseñaron, es decir, áreas de castigo privadas de todo lujo y con lo básico para que los reclusos puedan vivir, quizá otro gallo nos cantaría.
Y si alguien cree desacertada mi opinión, que tenga la amabilidad de decirme exactamente en qué punto de la declaración de derechos humanos se especifica que los contribuyentes debemos costearle durante años un hotel a un asesino.

Un día decido escribir una novela, y estoy tan orgulloso de mi obra que deseo publicarla. Pero claro, existe el riesgo de que alguien decida plagiarme, o bien distribuirla sin mi conocimiento ganando algo de dinero (que yo no veré) en el proceso. Para evitarlo, recurro a los derechos de autor.
Sin embargo, al permitir (como creador y dueño legítimo de mi obra) que terceras personas la exploten comercialmente con precios abusivos y tasas que violan la presunción de inocencia básica, estoy en cierto modo justificando el comportamiento de piratas y similares.
En resumen: Si los autores no quieren ser victimas de la piratería, que abandonen el barco pirata de la SGAE y sus adláteres a comisión y actúen en lugar de quejarse.

Hace tiempo, un director poco conocido presentó a varios productores el proyecto para su próxima película y fue rechazado por considerase una idea descabellada y sin ninguna salida. No tendría éxito.
Se llamaba Alejandro Amenábar y su proyecto se llama hoy "Los otros".
Más tarde se ha comprobado que las ideas alejadas de nuestro rancio cine tradicional resultan notablemente exitosas, hasta el punto de que generan su réplica fuera del país: "Abre los ojos", "Rec"...
El cine español se basa mayoritariamente en proyectos idénticos sin interés. Pero claro, la culpa de su baja calidad no la tienen los directores que no saben ser originales e innovadores sino quienes prefieren ver películas mejores, sea en las salas o en internet... muy sensato, si. Y muy medieval.

No se puede beber en la calle (lo que suponía un ahorro para muchos) ni apenas fumar (y menos en locales públicos, donde la bebida es más cara). La edad de jubilación roza los setenta años (por eso regulan el consumo de tabaco, siempre es bueno que los esclavos estén sanos) y los sueldos del trabajador medio son de los años setenta. Además, no queda siquiera el consuelo de desconectar de todo mediante series, películas o discos sin arriesgarse a pagar diez euros por algo que por su calidad no valdría más de tres. Y eso contando con lo que sabemos, entre tanta maniobra de distracción.
¿Qué esperamos para plantar cara? ¿Que nos obliguen a trabajar encadenados o que nos apliquen el derecho de pernada, quizá?
¿O acaso se está demasiado cómodo llorando en casa?

También puedes acabar con vuestro problema (ya que afecta a todo el bloque) atacando por el punto más débil.
Una sencilla junta vecinal, con todos presentes, donde se exponga la queja común serviría para que el vecino a quien viene a buscar se sienta lo bastante presionado como para acordar un sistema de aviso distinto y que no lo señale como "ese que hace que nos despierten a todos".
El poder y el alcance de la vergüenza pública es muy grande.

¿Has oído alguna vez esa famosa sentencia de Groucho Marx (un grande) que dice: "Jamás pertenecería a un club que me admitiera como socio"?
Lo digo porque a tu razonamiento, aun siendo relativamente correcto, le falta considerar que si no existiera una notable cantidad de mujeres que creen que el éxito se basa en exhibirse, mostrar cuanto sea necesario y obsesionarse con las tallas, muy probablemente todo cuanto comentas no sería un problema.
Que las mujeres que así piensen se conciencien antes de lo innecesario y sexista (según algunas) de su actitud, y entonces ya podremos pasar a debatir si estamos o no viviendo en un "imperio del machismo". Hasta entonces, eso de lo que te quejas seguirá existiendo mientras haya quien lo demande, lo consuma o lo valore.

¿Sentirse impactada con veinte años de edad por lo que hacen (algunos, no todos) adolescentes de catorce es "quedarse anticuada"? Pues en ese caso, tu concepto de "ser una persona sensata" debe resultar algo de lo más original.
Lo impactante es considerar que por tener veinte años y un mínimo de sentido común hay que entender los excesos de (algunos, no todos) niños sin apenas cerebro o de lo contrario ya se deja de ser "cool" porque se está pensando como un anciano.

No sé si definir todo esto como increíble o como indignante.
¿Cuando se habla de fútbol son legión los que defienden el derecho de los jugadores a cobrar las descomunales sumas que perciben por lo que hacen y ahora (quizá, como han dicho, por ser la moda) se le niega a los autores a cobrar por su obra? Si muchos aquí fuesen escritores o músicos, bien que defenderían sus sueldos.
Lo que sí es excesivo y patético es compararlo con las vacunas de los niños, porque la creación artística es en este caso un trabajo y no algo que puede salvar vidas. Y pretender cobrar cánones y precios excesivos por un disco o un libro es la verdadera piratería. A muchos, por lo que veo, no les quiere entrar en la cabeza la diferencia entre derechos de autor y precios abusivos.

#60 Puede que hayas querido decir #57
Ari88 y yo no somos la misma persona aunque reconozco que sus observaciones son muy acertadas.

Esto es una completa coyuntura porque con la información dada en el comentario #51 se añade una nueva perspectiva del asunto, y sucede que todo lo que se dice en #56 es absolutamente cierto pero a #58 tampoco le falta razón al opinar que si el novio quiere ir lo hará, y que también tiene boca para negarse desde un principio...
¿Asistimos quizá al nacimiento de un TQD que dentro de unos días vendrá a contarnos cómo acabó la historia?

#31 Adelante, lo suscribo.
Todo aquel que esté de acuerdo en mejorar (o al menos controlar) el sistema de moderación, que tenga la amabilidad de votar este comentario en positivo. Si llega al nivel de "destacado", me pondré en contacto con la señorita Dolinda para enviar un e-mail a los administradores, firmado por ambos, donde se solicite una modificación en el actual sistema por el bien común de los usuarios.