Eh... pues... ¿eso desde cuando?

Biológicamente es lo más favorable para la especie. El macho, con potencial para fecundar a numerosas hembras en poco tiempo, desea copular con muchas para extender su ADN (ergo, tiene mucho deseo sexual). La hembra, que solo puede ser fecundada por un macho a la vez y tendrá que invertir muchos recursos y energías en criar al vástago, quiere que el responsable se quede cerca para ayudarla con la tarea (por lo tanto, desarrolla sentimiento de apego hacia el macho). Aunque extrapolar algo tan simplista al ser humano me parece un error, sinceramente.

#2 #2 lostomatessondewisconsin dijo: Biológicamente es lo más favorable para la especie. El macho, con potencial para fecundar a numerosas hembras en poco tiempo, desea copular con muchas para extender su ADN (ergo, tiene mucho deseo sexual). La hembra, que solo puede ser fecundada por un macho a la vez y tendrá que invertir muchos recursos y energías en criar al vástago, quiere que el responsable se quede cerca para ayudarla con la tarea (por lo tanto, desarrolla sentimiento de apego hacia el macho). Aunque extrapolar algo tan simplista al ser humano me parece un error, sinceramente.@lostomatessondewisconsin No se donde ves el error ni la simplicidad, somos animales al fin y al cabo.

Siguiendo esa teoría, yo diría que las substancias que se liberan durante el sexo y cuando estás inlof son la clave. En alguna parte hay un equilibrio que algunos saben encontrar.
Pero ya que estamos, alea iacta est!
El universo es muy grande y algún día aparecerá Jack Harness

Es por las hormonas

#2 #2 lostomatessondewisconsin dijo: Biológicamente es lo más favorable para la especie. El macho, con potencial para fecundar a numerosas hembras en poco tiempo, desea copular con muchas para extender su ADN (ergo, tiene mucho deseo sexual). La hembra, que solo puede ser fecundada por un macho a la vez y tendrá que invertir muchos recursos y energías en criar al vástago, quiere que el responsable se quede cerca para ayudarla con la tarea (por lo tanto, desarrolla sentimiento de apego hacia el macho). Aunque extrapolar algo tan simplista al ser humano me parece un error, sinceramente.No se puede extrapolar a toda la raza humana, pero indudablemente genera patrones de comportamiento. Somos menos complejos y sofisticados de lo que nos gusta pensar.

Pues como te ha dicho #2,#2 lostomatessondewisconsin dijo: Biológicamente es lo más favorable para la especie. El macho, con potencial para fecundar a numerosas hembras en poco tiempo, desea copular con muchas para extender su ADN (ergo, tiene mucho deseo sexual). La hembra, que solo puede ser fecundada por un macho a la vez y tendrá que invertir muchos recursos y energías en criar al vástago, quiere que el responsable se quede cerca para ayudarla con la tarea (por lo tanto, desarrolla sentimiento de apego hacia el macho). Aunque extrapolar algo tan simplista al ser humano me parece un error, sinceramente. yo también opino que los tiros van por ahí.
Piensa también que no sólo es que ellas necesiten encontrar al mejor candidato, es que su ciclo hormonal es más traumático y genera más efectos colaterales como cambios de humor, dolores, vulnerabilidad y propensión a infecciones y un largo etcétera.
Además de eso, por lo general suele invalidar unos días su capacidad para reproducirse.
Y sí, el sexo se pensó para reproducirse y el orgasmo es el premio por intentarlo.
Un hombre siempre está potencialmente listo, así que es lógico hacer que su deseo sexual sea mayor y lo intente más, si lo que quieres es que tu especie se reproduzca...

Jajajaja, menos mal que no eres el macho de la Mantis Religiosa.

Ahí sí que tendrías que lamentarte.
A llorar a Jerusalén. XD

??? Hoy en día es hasta al revés xd

#9 #9 lucecita9 dijo: ??? Hoy en día es hasta al revés xdNo es hasta al revés. Ahora se tiene más conocimiento sobre estos temas (sexualidad en general, protección, ciclos, aparato reproductor, clítoris...) y la gente, por suerte, se aleja más de los prejuicios y las convicciones religiosas sobre la vida sexual.
Por lo tanto, las mujeres siempre han tenido deseo sexual igual que el hombre (porque para algo está en la supervivencia reproducirse), solo que antes y por desgracia en algunas culturas, la mujer ha de llegar virgen al matrimonio o sino es repudiada, ha de criar hijos y poco más y bajo estas sociedades, que el hombre sea sexualmente abierto no está mal visto, pero que lo sea una mujer es que es viciosa y ha se ser puta.
Luego, que biológicamente se haya que currar para excitar a la mujer que al hombre y que en ciertos días del mes las ganas bajan o sean inexistentes, es otro tema.

Este post debe estar esctrito por un niño con retraso mental. Si piensas que el mundo es así mal vas.

#1 #1 helitros dijo: Eh... pues... ¿eso desde cuando?#11 #11 thorkiell dijo: Este post debe estar esctrito por un niño con retraso mental. Si piensas que el mundo es así mal vas.De hecho la mayoría de estudios dicen que los hombres tiene verdaderamente más libido que las mujeres. La cosa discutible es que en la libido intervienen factores sociales, culturales y psicológicos además de biologicos, por lo que yo no sería tan rápido para decir "es que Dios nos hizo así" como el autor. A lo mejor dentro de un milenio de evolución social volvemos a estudiar el tema y nos da otro resultado.

Los picos más altos (de deseo sexual) se suelen encontrar en distintas épocas. Ellos entorno a los 18 años, ellas entorno a los 35. Creo recordar.

Pues sí. Dios, Diosa o Dioses varios son crueles jajaja

Mmm eso lo dirás tú. Somos animales, pero también tenemos mayor desarrollo mental y no nos guiamos por instinto. Hoy en día la mujer está más liberada en cuanto al sexo y a preferir estar soltera y liarse con muchos hombres, ese pensamiento es un poco antiguo ya.

#6 #6 peppercat dijo: #2 No se puede extrapolar a toda la raza humana, pero indudablemente genera patrones de comportamiento. Somos menos complejos y sofisticados de lo que nos gusta pensar. @peppercat Gracias, por mucho que a la gente le joda muchos de los comportamientos que consideramos constructos no son más que evoluciones de instintos primarios y tendencias biológicas innatas.

@godhates_us no, querido, si fuera así, también se cumpliría la norma de escoger al macho más fuerte, joven y sano. En cambio, las mujeres se enamoran de débiles, gordos, viejos y calvos. Así que no, esa teoría del instinto ha quedado muuuy desfasada tras la liberación sexual de la mujer.

#17 #17 nanasweet dijo: @godhates_us no, querido, si fuera así, también se cumpliría la norma de escoger al macho más fuerte, joven y sano. En cambio, las mujeres se enamoran de débiles, gordos, viejos y calvos. Así que no, esa teoría del instinto ha quedado muuuy desfasada tras la liberación sexual de la mujer. Estás interpretando mal la selección de pareja en la especie humana. Un bebé humano es dependiente de otros por una cantidad bestial de tiempo, y gran parte de su desarrollo en términos de habilidades de supervivencia depende de la crianza. En consecuencia, buscar buenos genes termina siendo solo una parte de la ecuación, y al final componentes como el ser “buen padre” (protector, atento, gentil con los más débiles, emocionalmente estable) o ser un buen proveedor (ambicioso, trabajador), lo que en principio ayuda a garantizar la supervivencia de descendencia apta, pueden inclinar la balanza y despertar en la hembra el interés reproductivo, que nuestros complejos cerebros humanos actuales convierten en atracción y posteriormente en amor. Con ello no quiero decir que el amor esté ligado al deseo de reproducir, igual que el deseo sexual no necesariamente lo está, pero el origen biológico de las reacciones químicas en el cerebro que a su vez generan las respuestas emocionales está ahí.

Como he dicho antes, somos menos sofisticados de lo que nos gusta creer que somos.

Los machos, en todas las especies, son meros fecundadores. De ahí que la evolución los dotara de mayor deseo sexual, porque solo sirven para follarse a la hembra y preñarla. Para el resto de cosas, las hembras se bastan. Pero una vez el macho ha cumplido su papel, como no sirve para otra cosa, es descartado en muchas especies. Por ejemplo las abejas matan a los zánganos y las mantis se zampan al macho.