Si comienza la guerra, reza para estar en el rango de muerte instantánea de las bombas atómicas.
Yo tengo suerte y vivo y trabajo junto a una instalación industrial importante, de modo que moriría en los primeros 10 minutos.
No tendría que ver los músculos desprendiendose de mis huesos, los dientes cayendo al morder algo más duro que un flan, vomitar sangre y eso solo para la radiación. Las armas biológicas son aterradoras y muy baratas de hacer, he visto fotos de enfermos de viruela; una cosa graciosa, no sabemos exactamente cómo mata la viruela porque te deja tan hecho mierda que podría haber sido muchas cosas.

Pues ya hace tiempo que te puedes ir, valiente.

Si vas allá, más vale que liberes a los ucranianos de sus gobernantes mafiosos.
Y de paso, como vas de antifa, los podrías liberar también de los que hacen homenajes a su gran héroe nacional, Stepán Bandera