Si tienes un problema mental diagnosticado estás tomando una medicación y yendo a una terapia en la que te dicen, de hecho, que tienes que adaptarte al mundo, no adaptar el mundo a ti (si necesitas un mundo adaptado a ti, lo que necesitas es internamiento).
Así que... Otra adolescente con un poco de ansiedad mal gestionada que ha buscado en Google y ha colgado el título de doctor en psiquiatría en su cuarto junto al póster de La Patrulla Canina.
3
Por muchos problemas que uno pueda tener, no es el deber de los demás ajustarse a uno. Además tampoco es como si ellos pudieran notar que estas soportando un montón de cosas sin decir nada, lo único que ellos perciben es que cada tanto sales con cosas raras que les resulta difícil comprender. Y aunque sea una necesidad tuya, ellos también tienen sus vidas y preocupaciones. Preocuparse por ti es una cortesía, no una obligación. No lo digo para decir que no hay que tener consideración a quienes sufran algún tipo de trastorno mental, al contrario. Pero tampoco pueden culpar a los demás si fallan al hacerlo, ni demandar que se ajusten a uno como si fuera su obligación, por muy pequeño que te parezca lo que pides.
Esto naturalmente puede variar dependiendo de que tan cercana sea la persona en cuestión, de una pareja por ejemplo, uno esperaría un mínimo de comprensión y consideración, aunque eso tampoco significa que tenga la obligación de ajustarse a ti en todo.
2
#4 #4 peppercat dijo: #1 #2 A ver, a ver... el mundo se adapta diariamente a las necesidades de distintos tipos de gente. Tenemos asientos reservados para ancianos, embarazadas y gente con alguna discapacidad, cambiadores de bebés en los baños, elevadores y rampas para sillas de ruedas, braile en una gran cantidad de letreros e indicadores, piscinas bajas y sillas altas para niños... Ninguna persona decente haría que su amigo con problemas cardiacos se subiera a la montaña rusa, ni insistiría en fumar frente a un niño asmático, por ejemplo.
Es un hecho que las enfermedades mentales han sido pasadas por alto durante siglos dentro de estas consideraciones, y no es ninguna tontería que si un paciente psiquiátrico pide de buenas maneras que se le tenga alguna deferencia por el estado de su salud mental, se le haga caso. Si nadie en su sano juicio haría a un paciente epiléptico a mirar una película cuyos cambios de luces pueden detonarle una crisis, y entendería que se saliera a media función, ¿por qué vemos bien que se obligue a una persona con ansiedad a exponer al frente de una clase, o a alguien con fobia a los perros a convivir con la mascota de alguien, por ejemplo? Una persona con una enfermedad mental merece tanta consideración como cualquier otro paciente, sin importar si se trata de una persona cercana o alguien a quien te cruzas por casualidad.#5 #5 frion dijo: #4 @peppercat Te daría la razón, un mínimo de consideración debe haber, a nivel social. A alguien con ansiedad no se le debería obligar a exponer en frente de la clase. Y en el caso de la fobia a una mascota, convivir con alguien entraría en la categoría de persona "cercana" (por la fuerza) que de alguna forma quise describir en mi comentario original, en el que debe tenerse más consideración (tal vez el de una pareja no fue el mejor ejemplo)
Pero de todas formas hay algo importante que tener en cuenta. La gran mayoría de las consideraciones para los otros problemas no suelen requerir un cambio activo en la conducta de las personas comunes. Es decir, los elevadores y las rampas para la silla de ruedas, el Braile... simplemente están allí, y a los demás no nos afecta para nada. A lo sumo con los ancianos y las embarazadas renunciaremos a un asiento. Pero no es un gran sacrificio pararse y viajar parado, ni es algo que requiera una consideración activa por parte nuestra (bueno, salvo que te la pases viendo si sube alguien a quien le debas dar el asiento por miedo a ser descortés). O también ayudar a alguien a moverse por un breve momento. Tal vez pierdas algo de tiempo, pero son pedidos muy simples de cumplir.
En todos los casos donde ayudar a alguien con un trastorno mental sea tan "simple" (para la gente común), te doy toda la razón, y cualquier persona decente debería hacerlo. Y puede ser que debería haberlo considerado antes. #6 #6 frion dijo: #4 #5 El problema es que a veces lo que te puede pedir alguien con algún trastorno psiquiátrico puede ser muy difícil para ti de evitar, algo que estas demasiado acostumbrado a hacer, o algo que requiere un esfuerzo activo para ti pensar en no hacerlo, porque es algo automático, aún si no lo haces seguido. No es algo que puedes hacerle caso en seguida, porque es algo que de por sí tal vez hagas inconscientemente. En esos casos definitivamente no puede culparse al otro por fallar. Lo mismo si son situaciones comunes que hay que hacer un esfuerzo para evitar. Si sus necesidades son incomprensibles, tampoco se puede culpar a los demás el no ser capaz de entenderlas y seguir a lo suyo. Entiendo que no es algo que uno deba comprender, y solo aceptar... pero para la mayoría de la gente, en el momento, eso es difícil de procesar. Como dije antes, depende del grado de cercanía, con alguien que convives, con un familiar, con amigos, de ellos cabría esperar que logren, con algo de esfuerzo, adecuarse a aquellas cosas que te afectan. Pero si estas con alguien que no conoces mucho, no puedes culparle. Y entiendo si la persona que sufre un trastorno necesita algo, pero esa persona también debería entender que su pedido podría ser exigente para el otro. Incluso a las propias personas con trastornos pueden resultarles difícil comprender los pedidos de otros en situación similar.
También puede resultar que los pedidos le resulte demasiado molestos al otro, y prefiera no estar contigo que cumplirlos. Que tampoco se le puede culpar, esos sentimientos son tan involuntarios como los problemas que pudieran impulsar a alguien a pedirle algo, y requieren cierto entrenamiento para ir suprimiendo. Así que es posible que la opción sea o aguantar o irse. Por un momento no pasa nada. Pero si fuera una reunión, y al final los otros la pasan mal porque los pedidos son irritantes... por muy triste que sea, es mejor irse.
Y sin mencionar los casos los que los pedidos y necesidades pueden llegar a resultar demasiado desgastantes para los demás, pero supongo que eso suele ocurrir más con las personas cercanas.
Pero bueno, puede ser que en mi comentario original tal y como lo exprese haya sido demasiado extremista, al final si tienes razón en que deberíamos tomar como una obligación moral el intentar tener consideración a los que sufren un trastorno. Pero mantengo el mensaje de que no se los debe culpar, ni exigir más de lo que puedan, y entender que no siempre será algo que estén dispuestos a hacer. Aunque si es algo que fácilmente podrían evitar, y lo hacen de todas formas, obviamente los que actúan mal son ellos. También reconozco que hice mal en asumir que el tipo de pedidos de la autora no eran simples, el TQD fue expresado en forma general y por eso hable de forma general. Posiblemente ella incluso este teniendo en cuenta todo lo que digo .
1
#1 #1 frion dijo: Por muchos problemas que uno pueda tener, no es el deber de los demás ajustarse a uno. Además tampoco es como si ellos pudieran notar que estas soportando un montón de cosas sin decir nada, lo único que ellos perciben es que cada tanto sales con cosas raras que les resulta difícil comprender. Y aunque sea una necesidad tuya, ellos también tienen sus vidas y preocupaciones. Preocuparse por ti es una cortesía, no una obligación. No lo digo para decir que no hay que tener consideración a quienes sufran algún tipo de trastorno mental, al contrario. Pero tampoco pueden culpar a los demás si fallan al hacerlo, ni demandar que se ajusten a uno como si fuera su obligación, por muy pequeño que te parezca lo que pides.
Esto naturalmente puede variar dependiendo de que tan cercana sea la persona en cuestión, de una pareja por ejemplo, uno esperaría un mínimo de comprensión y consideración, aunque eso tampoco significa que tenga la obligación de ajustarse a ti en todo. #2 #2 ifritzz dijo: Si tienes un problema mental diagnosticado estás tomando una medicación y yendo a una terapia en la que te dicen, de hecho, que tienes que adaptarte al mundo, no adaptar el mundo a ti (si necesitas un mundo adaptado a ti, lo que necesitas es internamiento).
Así que... Otra adolescente con un poco de ansiedad mal gestionada que ha buscado en Google y ha colgado el título de doctor en psiquiatría en su cuarto junto al póster de La Patrulla Canina.A ver, a ver... el mundo se adapta diariamente a las necesidades de distintos tipos de gente. Tenemos asientos reservados para ancianos, embarazadas y gente con alguna discapacidad, cambiadores de bebés en los baños, elevadores y rampas para sillas de ruedas, braile en una gran cantidad de letreros e indicadores, piscinas bajas y sillas altas para niños... Ninguna persona decente haría que su amigo con problemas cardiacos se subiera a la montaña rusa, ni insistiría en fumar frente a un niño asmático, por ejemplo.
Es un hecho que las enfermedades mentales han sido pasadas por alto durante siglos dentro de estas consideraciones, y no es ninguna tontería que si un paciente psiquiátrico pide de buenas maneras que se le tenga alguna deferencia por el estado de su salud mental, se le haga caso. Si nadie en su sano juicio haría a un paciente epiléptico a mirar una película cuyos cambios de luces pueden detonarle una crisis, y entendería que se saliera a media función, ¿por qué vemos bien que se obligue a una persona con ansiedad a exponer al frente de una clase, o a alguien con fobia a los perros a convivir con la mascota de alguien, por ejemplo? Una persona con una enfermedad mental merece tanta consideración como cualquier otro paciente, sin importar si se trata de una persona cercana o alguien a quien te cruzas por casualidad.
0
#4 #4 peppercat dijo: #1 #2 A ver, a ver... el mundo se adapta diariamente a las necesidades de distintos tipos de gente. Tenemos asientos reservados para ancianos, embarazadas y gente con alguna discapacidad, cambiadores de bebés en los baños, elevadores y rampas para sillas de ruedas, braile en una gran cantidad de letreros e indicadores, piscinas bajas y sillas altas para niños... Ninguna persona decente haría que su amigo con problemas cardiacos se subiera a la montaña rusa, ni insistiría en fumar frente a un niño asmático, por ejemplo.
Es un hecho que las enfermedades mentales han sido pasadas por alto durante siglos dentro de estas consideraciones, y no es ninguna tontería que si un paciente psiquiátrico pide de buenas maneras que se le tenga alguna deferencia por el estado de su salud mental, se le haga caso. Si nadie en su sano juicio haría a un paciente epiléptico a mirar una película cuyos cambios de luces pueden detonarle una crisis, y entendería que se saliera a media función, ¿por qué vemos bien que se obligue a una persona con ansiedad a exponer al frente de una clase, o a alguien con fobia a los perros a convivir con la mascota de alguien, por ejemplo? Una persona con una enfermedad mental merece tanta consideración como cualquier otro paciente, sin importar si se trata de una persona cercana o alguien a quien te cruzas por casualidad.@peppercat Te daría la razón, un mínimo de consideración debe haber, a nivel social. A alguien con ansiedad no se le debería obligar a exponer en frente de la clase. Y en el caso de la fobia a una mascota, convivir con alguien entraría en la categoría de persona "cercana" (por la fuerza) que de alguna forma quise describir en mi comentario original, en el que debe tenerse más consideración (tal vez el de una pareja no fue el mejor ejemplo)
Pero de todas formas hay algo importante que tener en cuenta. La gran mayoría de las consideraciones para los otros problemas no suelen requerir un cambio activo en la conducta de las personas comunes. Es decir, los elevadores y las rampas para la silla de ruedas, el Braile... simplemente están allí, y a los demás no nos afecta para nada. A lo sumo con los ancianos y las embarazadas renunciaremos a un asiento. Pero no es un gran sacrificio pararse y viajar parado, ni es algo que requiera una consideración activa por parte nuestra (bueno, salvo que te la pases viendo si sube alguien a quien le debas dar el asiento por miedo a ser descortés). O también ayudar a alguien a moverse por un breve momento. Tal vez pierdas algo de tiempo, pero son pedidos muy simples de cumplir.
En todos los casos donde ayudar a alguien con un trastorno mental sea tan "simple" (para la gente común), te doy toda la razón, y cualquier persona decente debería hacerlo. Y puede ser que debería haberlo considerado antes.
0
#4 #4 peppercat dijo: #1 #2 A ver, a ver... el mundo se adapta diariamente a las necesidades de distintos tipos de gente. Tenemos asientos reservados para ancianos, embarazadas y gente con alguna discapacidad, cambiadores de bebés en los baños, elevadores y rampas para sillas de ruedas, braile en una gran cantidad de letreros e indicadores, piscinas bajas y sillas altas para niños... Ninguna persona decente haría que su amigo con problemas cardiacos se subiera a la montaña rusa, ni insistiría en fumar frente a un niño asmático, por ejemplo.
Es un hecho que las enfermedades mentales han sido pasadas por alto durante siglos dentro de estas consideraciones, y no es ninguna tontería que si un paciente psiquiátrico pide de buenas maneras que se le tenga alguna deferencia por el estado de su salud mental, se le haga caso. Si nadie en su sano juicio haría a un paciente epiléptico a mirar una película cuyos cambios de luces pueden detonarle una crisis, y entendería que se saliera a media función, ¿por qué vemos bien que se obligue a una persona con ansiedad a exponer al frente de una clase, o a alguien con fobia a los perros a convivir con la mascota de alguien, por ejemplo? Una persona con una enfermedad mental merece tanta consideración como cualquier otro paciente, sin importar si se trata de una persona cercana o alguien a quien te cruzas por casualidad.#5 #5 frion dijo: #4 @peppercat Te daría la razón, un mínimo de consideración debe haber, a nivel social. A alguien con ansiedad no se le debería obligar a exponer en frente de la clase. Y en el caso de la fobia a una mascota, convivir con alguien entraría en la categoría de persona "cercana" (por la fuerza) que de alguna forma quise describir en mi comentario original, en el que debe tenerse más consideración (tal vez el de una pareja no fue el mejor ejemplo)
Pero de todas formas hay algo importante que tener en cuenta. La gran mayoría de las consideraciones para los otros problemas no suelen requerir un cambio activo en la conducta de las personas comunes. Es decir, los elevadores y las rampas para la silla de ruedas, el Braile... simplemente están allí, y a los demás no nos afecta para nada. A lo sumo con los ancianos y las embarazadas renunciaremos a un asiento. Pero no es un gran sacrificio pararse y viajar parado, ni es algo que requiera una consideración activa por parte nuestra (bueno, salvo que te la pases viendo si sube alguien a quien le debas dar el asiento por miedo a ser descortés). O también ayudar a alguien a moverse por un breve momento. Tal vez pierdas algo de tiempo, pero son pedidos muy simples de cumplir.
En todos los casos donde ayudar a alguien con un trastorno mental sea tan "simple" (para la gente común), te doy toda la razón, y cualquier persona decente debería hacerlo. Y puede ser que debería haberlo considerado antes. El problema es que a veces lo que te puede pedir alguien con algún trastorno psiquiátrico puede ser muy difícil para ti de evitar, algo que estas demasiado acostumbrado a hacer, o algo que requiere un esfuerzo activo para ti pensar en no hacerlo, porque es algo automático, aún si no lo haces seguido. No es algo que puedes hacerle caso en seguida, porque es algo que de por sí tal vez hagas inconscientemente. En esos casos definitivamente no puede culparse al otro por fallar. Lo mismo si son situaciones comunes que hay que hacer un esfuerzo para evitar. Si sus necesidades son incomprensibles, tampoco se puede culpar a los demás el no ser capaz de entenderlas y seguir a lo suyo. Entiendo que no es algo que uno deba comprender, y solo aceptar... pero para la mayoría de la gente, en el momento, eso es difícil de procesar. Como dije antes, depende del grado de cercanía, con alguien que convives, con un familiar, con amigos, de ellos cabría esperar que logren, con algo de esfuerzo, adecuarse a aquellas cosas que te afectan. Pero si estas con alguien que no conoces mucho, no puedes culparle. Y entiendo si la persona que sufre un trastorno necesita algo, pero esa persona también debería entender que su pedido podría ser exigente para el otro. Incluso a las propias personas con trastornos pueden resultarles difícil comprender los pedidos de otros en situación similar.
También puede resultar que los pedidos le resulte demasiado molestos al otro, y prefiera no estar contigo que cumplirlos. Que tampoco se le puede culpar, esos sentimientos son tan involuntarios como los problemas que pudieran impulsar a alguien a pedirle algo, y requieren cierto entrenamiento para ir suprimiendo. Así que es posible que la opción sea o aguantar o irse. Por un momento no pasa nada. Pero si fuera una reunión, y al final los otros la pasan mal porque los pedidos son irritantes... por muy triste que sea, es mejor irse.
0
Algunos, no todos. Como en todo.
-1
Deja tu comentario
Necesitas tener una cuenta para poder dejar comentarios.
Así que... Otra adolescente con un poco de ansiedad mal gestionada que ha buscado en Google y ha colgado el título de doctor en psiquiatría en su cuarto junto al póster de La Patrulla Canina.
Esto naturalmente puede variar dependiendo de que tan cercana sea la persona en cuestión, de una pareja por ejemplo, uno esperaría un mínimo de comprensión y consideración, aunque eso tampoco significa que tenga la obligación de ajustarse a ti en todo.
Es un hecho que las enfermedades mentales han sido pasadas por alto durante siglos dentro de estas consideraciones, y no es ninguna tontería que si un paciente psiquiátrico pide de buenas maneras que se le tenga alguna deferencia por el estado de su salud mental, se le haga caso. Si nadie en su sano juicio haría a un paciente epiléptico a mirar una película cuyos cambios de luces pueden detonarle una crisis, y entendería que se saliera a media función, ¿por qué vemos bien que se obligue a una persona con ansiedad a exponer al frente de una clase, o a alguien con fobia a los perros a convivir con la mascota de alguien, por ejemplo? Una persona con una enfermedad mental merece tanta consideración como cualquier otro paciente, sin importar si se trata de una persona cercana o alguien a quien te cruzas por casualidad.#5 #5 frion dijo: #4 @peppercat Te daría la razón, un mínimo de consideración debe haber, a nivel social. A alguien con ansiedad no se le debería obligar a exponer en frente de la clase. Y en el caso de la fobia a una mascota, convivir con alguien entraría en la categoría de persona "cercana" (por la fuerza) que de alguna forma quise describir en mi comentario original, en el que debe tenerse más consideración (tal vez el de una pareja no fue el mejor ejemplo)
Pero de todas formas hay algo importante que tener en cuenta. La gran mayoría de las consideraciones para los otros problemas no suelen requerir un cambio activo en la conducta de las personas comunes. Es decir, los elevadores y las rampas para la silla de ruedas, el Braile... simplemente están allí, y a los demás no nos afecta para nada. A lo sumo con los ancianos y las embarazadas renunciaremos a un asiento. Pero no es un gran sacrificio pararse y viajar parado, ni es algo que requiera una consideración activa por parte nuestra (bueno, salvo que te la pases viendo si sube alguien a quien le debas dar el asiento por miedo a ser descortés). O también ayudar a alguien a moverse por un breve momento. Tal vez pierdas algo de tiempo, pero son pedidos muy simples de cumplir.
En todos los casos donde ayudar a alguien con un trastorno mental sea tan "simple" (para la gente común), te doy toda la razón, y cualquier persona decente debería hacerlo. Y puede ser que debería haberlo considerado antes.
#6 #6 frion dijo: #4 #5 El problema es que a veces lo que te puede pedir alguien con algún trastorno psiquiátrico puede ser muy difícil para ti de evitar, algo que estas demasiado acostumbrado a hacer, o algo que requiere un esfuerzo activo para ti pensar en no hacerlo, porque es algo automático, aún si no lo haces seguido. No es algo que puedes hacerle caso en seguida, porque es algo que de por sí tal vez hagas inconscientemente. En esos casos definitivamente no puede culparse al otro por fallar. Lo mismo si son situaciones comunes que hay que hacer un esfuerzo para evitar. Si sus necesidades son incomprensibles, tampoco se puede culpar a los demás el no ser capaz de entenderlas y seguir a lo suyo. Entiendo que no es algo que uno deba comprender, y solo aceptar... pero para la mayoría de la gente, en el momento, eso es difícil de procesar. Como dije antes, depende del grado de cercanía, con alguien que convives, con un familiar, con amigos, de ellos cabría esperar que logren, con algo de esfuerzo, adecuarse a aquellas cosas que te afectan. Pero si estas con alguien que no conoces mucho, no puedes culparle. Y entiendo si la persona que sufre un trastorno necesita algo, pero esa persona también debería entender que su pedido podría ser exigente para el otro. Incluso a las propias personas con trastornos pueden resultarles difícil comprender los pedidos de otros en situación similar.
También puede resultar que los pedidos le resulte demasiado molestos al otro, y prefiera no estar contigo que cumplirlos. Que tampoco se le puede culpar, esos sentimientos son tan involuntarios como los problemas que pudieran impulsar a alguien a pedirle algo, y requieren cierto entrenamiento para ir suprimiendo. Así que es posible que la opción sea o aguantar o irse. Por un momento no pasa nada. Pero si fuera una reunión, y al final los otros la pasan mal porque los pedidos son irritantes... por muy triste que sea, es mejor irse.
Y sin mencionar los casos los que los pedidos y necesidades pueden llegar a resultar demasiado desgastantes para los demás, pero supongo que eso suele ocurrir más con las personas cercanas.
Pero bueno, puede ser que en mi comentario original tal y como lo exprese haya sido demasiado extremista, al final si tienes razón en que deberíamos tomar como una obligación moral el intentar tener consideración a los que sufren un trastorno. Pero mantengo el mensaje de que no se los debe culpar, ni exigir más de lo que puedan, y entender que no siempre será algo que estén dispuestos a hacer. Aunque si es algo que fácilmente podrían evitar, y lo hacen de todas formas, obviamente los que actúan mal son ellos. También reconozco que hice mal en asumir que el tipo de pedidos de la autora no eran simples, el TQD fue expresado en forma general y por eso hable de forma general. Posiblemente ella incluso este teniendo en cuenta todo lo que digo .
Esto naturalmente puede variar dependiendo de que tan cercana sea la persona en cuestión, de una pareja por ejemplo, uno esperaría un mínimo de comprensión y consideración, aunque eso tampoco significa que tenga la obligación de ajustarse a ti en todo.
#2 #2 ifritzz dijo: Si tienes un problema mental diagnosticado estás tomando una medicación y yendo a una terapia en la que te dicen, de hecho, que tienes que adaptarte al mundo, no adaptar el mundo a ti (si necesitas un mundo adaptado a ti, lo que necesitas es internamiento).
Así que... Otra adolescente con un poco de ansiedad mal gestionada que ha buscado en Google y ha colgado el título de doctor en psiquiatría en su cuarto junto al póster de La Patrulla Canina.A ver, a ver... el mundo se adapta diariamente a las necesidades de distintos tipos de gente. Tenemos asientos reservados para ancianos, embarazadas y gente con alguna discapacidad, cambiadores de bebés en los baños, elevadores y rampas para sillas de ruedas, braile en una gran cantidad de letreros e indicadores, piscinas bajas y sillas altas para niños... Ninguna persona decente haría que su amigo con problemas cardiacos se subiera a la montaña rusa, ni insistiría en fumar frente a un niño asmático, por ejemplo.
Es un hecho que las enfermedades mentales han sido pasadas por alto durante siglos dentro de estas consideraciones, y no es ninguna tontería que si un paciente psiquiátrico pide de buenas maneras que se le tenga alguna deferencia por el estado de su salud mental, se le haga caso. Si nadie en su sano juicio haría a un paciente epiléptico a mirar una película cuyos cambios de luces pueden detonarle una crisis, y entendería que se saliera a media función, ¿por qué vemos bien que se obligue a una persona con ansiedad a exponer al frente de una clase, o a alguien con fobia a los perros a convivir con la mascota de alguien, por ejemplo? Una persona con una enfermedad mental merece tanta consideración como cualquier otro paciente, sin importar si se trata de una persona cercana o alguien a quien te cruzas por casualidad.
Es un hecho que las enfermedades mentales han sido pasadas por alto durante siglos dentro de estas consideraciones, y no es ninguna tontería que si un paciente psiquiátrico pide de buenas maneras que se le tenga alguna deferencia por el estado de su salud mental, se le haga caso. Si nadie en su sano juicio haría a un paciente epiléptico a mirar una película cuyos cambios de luces pueden detonarle una crisis, y entendería que se saliera a media función, ¿por qué vemos bien que se obligue a una persona con ansiedad a exponer al frente de una clase, o a alguien con fobia a los perros a convivir con la mascota de alguien, por ejemplo? Una persona con una enfermedad mental merece tanta consideración como cualquier otro paciente, sin importar si se trata de una persona cercana o alguien a quien te cruzas por casualidad.@peppercat Te daría la razón, un mínimo de consideración debe haber, a nivel social. A alguien con ansiedad no se le debería obligar a exponer en frente de la clase. Y en el caso de la fobia a una mascota, convivir con alguien entraría en la categoría de persona "cercana" (por la fuerza) que de alguna forma quise describir en mi comentario original, en el que debe tenerse más consideración (tal vez el de una pareja no fue el mejor ejemplo)
Pero de todas formas hay algo importante que tener en cuenta. La gran mayoría de las consideraciones para los otros problemas no suelen requerir un cambio activo en la conducta de las personas comunes. Es decir, los elevadores y las rampas para la silla de ruedas, el Braile... simplemente están allí, y a los demás no nos afecta para nada. A lo sumo con los ancianos y las embarazadas renunciaremos a un asiento. Pero no es un gran sacrificio pararse y viajar parado, ni es algo que requiera una consideración activa por parte nuestra (bueno, salvo que te la pases viendo si sube alguien a quien le debas dar el asiento por miedo a ser descortés). O también ayudar a alguien a moverse por un breve momento. Tal vez pierdas algo de tiempo, pero son pedidos muy simples de cumplir.
En todos los casos donde ayudar a alguien con un trastorno mental sea tan "simple" (para la gente común), te doy toda la razón, y cualquier persona decente debería hacerlo. Y puede ser que debería haberlo considerado antes.
Es un hecho que las enfermedades mentales han sido pasadas por alto durante siglos dentro de estas consideraciones, y no es ninguna tontería que si un paciente psiquiátrico pide de buenas maneras que se le tenga alguna deferencia por el estado de su salud mental, se le haga caso. Si nadie en su sano juicio haría a un paciente epiléptico a mirar una película cuyos cambios de luces pueden detonarle una crisis, y entendería que se saliera a media función, ¿por qué vemos bien que se obligue a una persona con ansiedad a exponer al frente de una clase, o a alguien con fobia a los perros a convivir con la mascota de alguien, por ejemplo? Una persona con una enfermedad mental merece tanta consideración como cualquier otro paciente, sin importar si se trata de una persona cercana o alguien a quien te cruzas por casualidad.#5 #5 frion dijo: #4 @peppercat Te daría la razón, un mínimo de consideración debe haber, a nivel social. A alguien con ansiedad no se le debería obligar a exponer en frente de la clase. Y en el caso de la fobia a una mascota, convivir con alguien entraría en la categoría de persona "cercana" (por la fuerza) que de alguna forma quise describir en mi comentario original, en el que debe tenerse más consideración (tal vez el de una pareja no fue el mejor ejemplo)
Pero de todas formas hay algo importante que tener en cuenta. La gran mayoría de las consideraciones para los otros problemas no suelen requerir un cambio activo en la conducta de las personas comunes. Es decir, los elevadores y las rampas para la silla de ruedas, el Braile... simplemente están allí, y a los demás no nos afecta para nada. A lo sumo con los ancianos y las embarazadas renunciaremos a un asiento. Pero no es un gran sacrificio pararse y viajar parado, ni es algo que requiera una consideración activa por parte nuestra (bueno, salvo que te la pases viendo si sube alguien a quien le debas dar el asiento por miedo a ser descortés). O también ayudar a alguien a moverse por un breve momento. Tal vez pierdas algo de tiempo, pero son pedidos muy simples de cumplir.
En todos los casos donde ayudar a alguien con un trastorno mental sea tan "simple" (para la gente común), te doy toda la razón, y cualquier persona decente debería hacerlo. Y puede ser que debería haberlo considerado antes.
El problema es que a veces lo que te puede pedir alguien con algún trastorno psiquiátrico puede ser muy difícil para ti de evitar, algo que estas demasiado acostumbrado a hacer, o algo que requiere un esfuerzo activo para ti pensar en no hacerlo, porque es algo automático, aún si no lo haces seguido. No es algo que puedes hacerle caso en seguida, porque es algo que de por sí tal vez hagas inconscientemente. En esos casos definitivamente no puede culparse al otro por fallar. Lo mismo si son situaciones comunes que hay que hacer un esfuerzo para evitar. Si sus necesidades son incomprensibles, tampoco se puede culpar a los demás el no ser capaz de entenderlas y seguir a lo suyo. Entiendo que no es algo que uno deba comprender, y solo aceptar... pero para la mayoría de la gente, en el momento, eso es difícil de procesar. Como dije antes, depende del grado de cercanía, con alguien que convives, con un familiar, con amigos, de ellos cabría esperar que logren, con algo de esfuerzo, adecuarse a aquellas cosas que te afectan. Pero si estas con alguien que no conoces mucho, no puedes culparle. Y entiendo si la persona que sufre un trastorno necesita algo, pero esa persona también debería entender que su pedido podría ser exigente para el otro. Incluso a las propias personas con trastornos pueden resultarles difícil comprender los pedidos de otros en situación similar.
También puede resultar que los pedidos le resulte demasiado molestos al otro, y prefiera no estar contigo que cumplirlos. Que tampoco se le puede culpar, esos sentimientos son tan involuntarios como los problemas que pudieran impulsar a alguien a pedirle algo, y requieren cierto entrenamiento para ir suprimiendo. Así que es posible que la opción sea o aguantar o irse. Por un momento no pasa nada. Pero si fuera una reunión, y al final los otros la pasan mal porque los pedidos son irritantes... por muy triste que sea, es mejor irse.