Muy amiga no es. Quizá conocida para ir de fiesta o comer unas pipas en el parque. Poco más.
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La amistad que compartimos es una intrincada tela tejida con hilos de conocimiento intermitente. Tal vez, podríamos categorizarla como una relación de conocidos, quizás destinada a reuniones sociales o al disfrute de un momento tranquilo en el parque, mientras compartimos unas pipas y observamos la efímera danza de la vida. Sin embargo, si nos aventuramos más allá de las apariencias superficiales, descubriremos que el tejido de nuestra interacción es complejo y multifacético, donde la distancia entre la familiaridad y la amistad genuina se desdibuja en el lienzo de nuestras experiencias compartidas.
En una tesitura salomónica, contemplando nuestra relación desde una perspectiva dialéctica, se me presenta la oportunidad de plantear dos opciones equívocas, como las madres frente al juicio del sabio rey. Por un lado, podríamos interpretar nuestra conexión como una mera coincidencia casual en el devenir de nuestras vidas, un encuentro efímero destinado a desvanecerse en el flujo del tiempo como una hoja llevada por el viento. Por otro lado, podríamos explorar la posibilidad de que esta relación encierre potenciales desconocidos, ocultos en los pliegues del destino, esperando ser desentrañados y cultivados para florecer en una amistad más profunda y significativa, una que trascienda las limitaciones del tiempo y el espacio.
Así, en este cruce de caminos entre la percepción superficial y la introspección profunda, entre la transitoriedad y la permanencia, nos encontramos en la encrucijada de la amistad, donde la reflexión y la decisión se entrelazan en una danza etérea de posibilidades infinitas. La elección, entonces, recae en nosotros, en nuestra disposición para explorar los misterios de la conexión humana y cultivar los lazos que nos unen, trascendiendo las fronteras de lo conocido hacia un territorio de encuentro y descubrimiento mutuo
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#2 #2 bitchute dijo: La amistad que compartimos es una intrincada tela tejida con hilos de conocimiento intermitente. Tal vez, podríamos categorizarla como una relación de conocidos, quizás destinada a reuniones sociales o al disfrute de un momento tranquilo en el parque, mientras compartimos unas pipas y observamos la efímera danza de la vida. Sin embargo, si nos aventuramos más allá de las apariencias superficiales, descubriremos que el tejido de nuestra interacción es complejo y multifacético, donde la distancia entre la familiaridad y la amistad genuina se desdibuja en el lienzo de nuestras experiencias compartidas.
En una tesitura salomónica, contemplando nuestra relación desde una perspectiva dialéctica, se me presenta la oportunidad de plantear dos opciones equívocas, como las madres frente al juicio del sabio rey. Por un lado, podríamos interpretar nuestra conexión como una mera coincidencia casual en el devenir de nuestras vidas, un encuentro efímero destinado a desvanecerse en el flujo del tiempo como una hoja llevada por el viento. Por otro lado, podríamos explorar la posibilidad de que esta relación encierre potenciales desconocidos, ocultos en los pliegues del destino, esperando ser desentrañados y cultivados para florecer en una amistad más profunda y significativa, una que trascienda las limitaciones del tiempo y el espacio.
Así, en este cruce de caminos entre la percepción superficial y la introspección profunda, entre la transitoriedad y la permanencia, nos encontramos en la encrucijada de la amistad, donde la reflexión y la decisión se entrelazan en una danza etérea de posibilidades infinitas. La elección, entonces, recae en nosotros, en nuestra disposición para explorar los misterios de la conexión humana y cultivar los lazos que nos unen, trascendiendo las fronteras de lo conocido hacia un territorio de encuentro y descubrimiento mutuo@bitchute Jejeje.
Un deleite para mis sentidos. Puro arte conceptual.
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#3 #3 sc42 dijo: #2 @bitchute Jejeje.
Un deleite para mis sentidos. Puro arte conceptual. @sc42
Lo leiste entero?
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#4 #4 bitchute dijo: #3 @sc42
Lo leiste entero?
[img]https://i.pinimg.com/originals/fb/63/ce/fb63ce36de5e16595cd9c73d5634a2b1.gif[/img]@bitchute sí, si no lo leí anoche lo he hecho ahora. Es poesía pura xD. Te lo has currado, o tienes mucha facilidad para la retórica.
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En una tesitura salomónica, contemplando nuestra relación desde una perspectiva dialéctica, se me presenta la oportunidad de plantear dos opciones equívocas, como las madres frente al juicio del sabio rey. Por un lado, podríamos interpretar nuestra conexión como una mera coincidencia casual en el devenir de nuestras vidas, un encuentro efímero destinado a desvanecerse en el flujo del tiempo como una hoja llevada por el viento. Por otro lado, podríamos explorar la posibilidad de que esta relación encierre potenciales desconocidos, ocultos en los pliegues del destino, esperando ser desentrañados y cultivados para florecer en una amistad más profunda y significativa, una que trascienda las limitaciones del tiempo y el espacio.
Así, en este cruce de caminos entre la percepción superficial y la introspección profunda, entre la transitoriedad y la permanencia, nos encontramos en la encrucijada de la amistad, donde la reflexión y la decisión se entrelazan en una danza etérea de posibilidades infinitas. La elección, entonces, recae en nosotros, en nuestra disposición para explorar los misterios de la conexión humana y cultivar los lazos que nos unen, trascendiendo las fronteras de lo conocido hacia un territorio de encuentro y descubrimiento mutuo
En una tesitura salomónica, contemplando nuestra relación desde una perspectiva dialéctica, se me presenta la oportunidad de plantear dos opciones equívocas, como las madres frente al juicio del sabio rey. Por un lado, podríamos interpretar nuestra conexión como una mera coincidencia casual en el devenir de nuestras vidas, un encuentro efímero destinado a desvanecerse en el flujo del tiempo como una hoja llevada por el viento. Por otro lado, podríamos explorar la posibilidad de que esta relación encierre potenciales desconocidos, ocultos en los pliegues del destino, esperando ser desentrañados y cultivados para florecer en una amistad más profunda y significativa, una que trascienda las limitaciones del tiempo y el espacio.
Así, en este cruce de caminos entre la percepción superficial y la introspección profunda, entre la transitoriedad y la permanencia, nos encontramos en la encrucijada de la amistad, donde la reflexión y la decisión se entrelazan en una danza etérea de posibilidades infinitas. La elección, entonces, recae en nosotros, en nuestra disposición para explorar los misterios de la conexión humana y cultivar los lazos que nos unen, trascendiendo las fronteras de lo conocido hacia un territorio de encuentro y descubrimiento mutuo@bitchute Jejeje.
Un deleite para mis sentidos. Puro arte conceptual.
Un deleite para mis sentidos. Puro arte conceptual. @sc42
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[img]https://i.pinimg.com/originals/fb/63/ce/fb63ce36de5e16595cd9c73d5634a2b1.gif[/img]@bitchute sí, si no lo leí anoche lo he hecho ahora. Es poesía pura xD. Te lo has currado, o tienes mucha facilidad para la retórica.