No sabría decir qué me parece más triste: El hecho de que haya gente cuyo concepto de diversión depende por completo de la cantidad de alcohol que haya presente o el hecho de que existan simios disfrazados de seres humanos que juzgan si una persona se merece o no su amistad en base a criterios tan maduros como el ser bebedor o no serlo.
Por eso cualquier ejemplar de ambos casos me parece y siempre me parecerá absolutamente patético.

Cinco años de relación feliz e ininterrumpida con únicamente un amenazador amago de ruptura que ni tan siquiera llegó a los diez días. Y aún seguimos juntos tras haber pasado por escenas y situaciones mil veces peores que lo que se sugiere en el presente TQD.
De modo que no sé muy bien si sentirme especial por formar parte del supuestamente pequeño porcentaje de parejas que sobreviven a esa repentina escena de sinceridad o asustarme mucho por estar potencialmente rodeado de inútiles que por lo visto no sabrían salir de una trampa tan evidente.
Aficionados, aficionados everywhere.

¿"Agradezco que no me permitáis ir a la cena de navidad"?
¿El resto de los alumnos de la clase tiene autoridad sobre ti?

¿Quien eres, la mascota del instituto?

Si ellas (o cualquier otro débil de voluntad adicto a su Blackberry) te ignoran se merecen que las ignores.

Han decidido sustituirte por un aparato que les hace más felices al poder presumir de una vida social virtual que resulta ser falsa y magnificada por ellas mismas en un muy alto porcentaje, justo es que tú las reemplaces por personas que sepan tratarte con respeto y sean capaces de socializar sin depender de un teléfono móvil.

#18 De hecho si tenemos en cuenta que actualmente el estereotipo habitual de chico joven que abunda en las discotecas es el de un varón delgado y casi absolutamente carente de vello facial que sale a la calle embutido en pantalones estrechos, conjuntado hasta la obsesión de manera excesivamente colorida, con un peinado más o menos ridículo y acercándose a las mujeres con técnicas de seducción lamentables que a él le parecen originales y rompedoras... yo diría que más que a Barney Stinson tratan de imitar a Howard Wolowitz.
Y lo más inexplicable de todo es que los muy idiotas todavía no se han dado cuenta de eso.

¿Realmente hacía falta invertir nada menos que catorce mil euros en enseñar a los jóvenes a autocomplacerse?

Pues quienes nacimos a finales del siglo XX tuvimos que aprender gratis y no hemos tenido el menor problema con ello, así que una de dos: O bien el gobierno ya no sabe qué excusa inventar para justificar gastos o bien los niños de hoy en día son un hatajo de completos inútiles.

#7 Considerando la media de edad de los usuarios que se asoman por aquí a estas horas... yo diría que entre catorce y diecisiete, siendo además muy optimista con mis cálculos.

#11 No te falta razón en absoluto, aunque por lo que recuerdo de mi adolescencia las chicas no se fijaban tanto en la simpatía y la originalidad sino más bien en el físico, las facciones del rostro y la marca de los vaqueros.
Al menos en el miserablemente elitista entorno en que transcurrieron mis años escolares.

Prueba a emplear la técnica del buzo, la del viajero del tiempo y la del fantasma en un lugar público.
Si aceptas el desafío y consigues que te funcionen te habrás merecido sin ninguna duda un puesto en el panteón de los dioses del siglo XXI.

1-Algunos psicólogos opinan que las personas que tienden a escribir su nombre en cualquier parte cada vez que tienen ocasión de hacerlo (o a repetirlo una y otra vez como por cierto suelen hacer varios "artistas" en sus canciones) tienden a ser bastante inseguras.
2-El órgano sexual masculino es el pene. Esto significa que cada varón tiene uno, y suele considerarlo una parte de su identidad tan íntima y personal como el propio nombre.
3-Muchos hombres dibujan penes cada vez que se les presenta la oportunidad y suelen expresarse empleando con frecuencia sinónimos del mismo (llegados aquí véase de nuevo el punto 1).

Con todos esos datos puedes sacar tus propias conclusiones.

Siempre llevo conmigo un reproductor de mp3 de dieciséis gigabytes de capacidad en cuya memoria hay actualmente mil doscientos diez temas musicales. No presumo de eso.
Toda esa música está a su vez clasificada en cuatro carpetas y cinco subcarpetas según los géneros musicales que en ellas se incluyan como pueden ser electrónica, pop, metal, bandas sonoras, rap, hip-hop, jazz y etcétera. Tampoco presumo de eso.
De lo que sí puedo presumir es de que nunca olvido que se trata de mis gustos, razón por la que empleo los auriculares y no me dedico a obligar a nadie a escuchar lo que yo quiera ni a tratar de llamar la atención como un crío.
Ese respeto al oído ajeno, en mi opinión, es más importante que los gustos musicales de cada cual.

Antes los zombies eran sencillamente muertos que se levantaban de sus tumbas empujados por un ansia inhumana de devorar cerebros vivos, más tarde se trataba de humanos afectados por una infección vírica que les transformaba en caníbales dementes...
Y al paso que van las cosas, no me sorprendería que los zombies del siglo XXI fuesen humanos cuya inteligencia ha sido reemplazada por una casi absoluta dependencia de sus smartphones. No hay más que salir a la calle y verlos caminar con la mirada fija (en la pantalla de su terminal), andando lentamente (para no tropezar) y sufriendo arrebatos de furia si se les agota la batería o alguien les señala lo grosero que es estar pendiente del teléfono mientras les están hablando.
Cyberzombies, cyberzombies everywhere.

De ser cierto lo que comentas, el tal Rubén se ha ganado a pulso que tanto sus perfiles como el suceso en cuestión se hagan públicos para evitar dos cosas: Que alguna pobre chica caiga en las manos de semejante bastardo y que el muy miserable aprenda algo de respeto y de madurez a costa de pasarse meses (si no años) tan solo como se merece.
Y si no fuera porque hacer algo así sería violar la ley de privacidad yo mismo invitaría a cualquiera que le conociese a hacerlo.

"Máxima FM" y el poner de moda casi obligatoriamente la música house y el neo-dance nacieron en algún punto entre 2005 y 2006. De eso hace como mucho seis años en los cuales han sonado y se han dado a conocer decenas de temas musicales.
¿Realmente la humanidad es tan idiota y tan ciega como para que hiciera falta que alguien se molestase en demostrar mediante ese sistema que la inmensa mayoría de temas son prácticamente idénticos? ¿De verdad nadie se había dado cuenta en todo este tiempo de algo que es tan evidente como una bofetada?

#39 No sugiero que seas tonto, más bien pretendía ironizar acerca de lo estúpida que me parece toda aquella persona que (a partir de cierta edad) utiliza un medio de comunicación directo y eficaz para convertirlo prácticamente en un diario innecesariamente detallado o en un monumento a su propio ego.
En cualquier caso no pretendía ofenderte en absoluto.
#37 Ciertamente cabe esa posibilidad ya que yo mismo formo parte de ese porcentaje que mencionas.

Esa es, en tu opinión, una de las cosas más insoportables que pueden suceder en verano.
Y por supuesto el mejor momento para hablar de ello es a comienzos de Diciembre.

#17 Según las estadísticas oficiales, en Abril de 2010 éramos el tercer país con mayor número de usuarios (el setenta y siete por ciento de la población).
Un año y ocho meses después no tienes más que salir a la calle, sentarte cerca de cualquier cafetería y observar que por regla general ocho de cada diez personas que veas estará utilizando su teléfono móvil (normalmente un smartphone) para actualizar estados, responder mensajes, publicar fotografías y demás parafernalia virtual aunque ello suponga ignorar groseramente a quienes estén a su alrededor.
De modo que el porcentaje quizá no sea exacto, pero desgraciadamente se le aproxima bastante en la actualidad.

A ver si lo he entendido: El noventa y cinco por ciento de la población tiene perfil activo en redes como Facebook o Tuenti, y la inmensa mayoría de los usuarios están conectados a ellas prácticamente todo el día (desde portátil, pc tablet o smartphone) a veces llegando incluso a rozar la dependencia. Comentan cualquier cosa que les haya sucedido por estúpida que sea, publican cientos de fotografías esencialmente idénticas (mismas personas, mismo escenario o misma pose) y agregan casi a cualquiera... pero nadie te avisa de algo tan relevante como lo que comentas.
Pues una de dos: O bien esto es un "fake" como una laguna o bien el abuso que se hace de esas redes está volviendo a la gente mucho más imbécil de lo que en principio me temía.

Dato del día: La adolescencia es el periodo de edad humana que se inicia normalmente entre los diez y doce años y que suele finalizar aproximadamente entre los diecinueve y los veinte.

Así que lamento comunicarte que (salvo que hayas sobrepasado la veintena) existen bastantes posibilidades de que no hayas encontrado exactamente tu "diario de la adolescencia" sino en todo caso tu "diario de aquellos años en que era bastante infantil y no me quería dar cuenta".
De ser cierta mi hipótesis significaría automáticamente que has cantado victoria demasiado pronto.

"He desarrollado una bonita obsesión-fobia".
Como forma de referirse al sadomasoquismo no se puede negar que es de lo más original.

#33 Incluso peor aún: Un hombre (el portero del local) permite el acceso a chicas de catorce años bajo instrucciones de otro hombre (el dueño) porque, mientras sean atractivas y luzcan un escote hasta el ombligo, su presencia asegurará la entrada de muchos otros hombres adultos a quienes por lo visto les gustan las menores fáciles y entregadas porque quizá son unos cobardes cretinos incapaces de acercarse a veinteañeras.

Cuando tenía catorce años tuve muchas compañeras de clase que se colaban en las discotecas porque les daba morbo hacérselo con chicos mayores, los cuales abundaban porque sabían que estas crías se dejaban.
No sabría decir cual de esos dos tipos de persona tiene menos autoestima.